Un estudio europeo (The olive and the vine in European prehistory*) estudió restos arqueobotánicos de grandes cantidades de uvas prensadas y huesos de aceituna triturados encontrados en numerosos yacimientos arqueológicos situados en Grecia y Chipre. El resultado concluyó que desde el tercer milenio a. C. ambas especies ya se cultivaban simbioticamente para la producción de Aceite de Oliva y Vino.